jueves, 28 de agosto de 2008

El Bernardo o la Victoria de Roncesvalles. Bernardo de Balbuena.


En 1595 el cura de la entonces remota y pequeña aldea de San Pedro Lagunillas, en el actual estado de Nayarit , escribió aún siendo muy joven, un poema inscrito en la tradición literaria de la épica caballeresca y culta. Un poema grandioso por su extensión, ya que está compuesto de cinco mil octavas reales, es decir un total de cuarenta mil versos, divididos en veinticuatro libros. Resultó enorme también en cuanto a su calidad, al grado de que en el pasado se le consideró como una de las obras maestras de la literatura en español. Lope de Vega, Voltaire, Chateaubriand no escatimaron elogios para esta obra; mas cercano a nosotros, Pedro Enriquez Ureña consideró que la de Balbuena es la principal contribución de hispanoamérica al barroco en literatura, Decía "Su Bernardo es comparable, en magnitud al convento de Tepotzotlan".
El argumento del poema se construye utilizando como estructura básica la leyenda medieval del héroe español Bernardo del Carpio, que surge en oposición a la gesta de Roldan y a la versión francesa de Roncesvalles.
Bernardo del Carpio infringe una terrible derrota a Carlo Magno y a los doce pares de Francia. El autor le adiciona al poema una serie de elementos idílicos, viajes fantásticos, episodios históricos, personajes mágicos, como hadas y brujos . La mezcla de todos los elementos es escenificada en Europa, África y América. Esto convierte al poema en una travesía que nos remonta a los orígenes godos de los caballeros españoles y finaliza con la conquista y poblamiento de América. Es un poema que exalta la grandeza del mundo hispánico del siglo XVII el cual es personificado en la figura de Bernardo .
Entre los libros que componen el poema, el decimoctavo y el decimonono del Bernardo resultan particularmente interesantes; en ellos se narra el fantástico viaje del sabio Malgesí en una nave voladora, en la que visita la luna, y desde allí viaja a las Indias Occidentales, en especial a la Nueva España en donde comienza a perfilar el amor y la admiración que Balbuena profesó a esta tierra. Es en la Nueva España donde el mago tlascalán ataja el vuelo de Malgesí y le muestra las maravillas de su cueva.
El Bernardo o la Victoria de Roncesvalles se imprimió por vez primera en 1624 se reeditó en 1808 (en la legendaria imprenta de Don Antonio de Sancha) , luego en 1851 (Biblioteca de autores españoles) siendo la penúltima edición la de 1852 (Gaspar y Roig). En 1988 la SEP en su colección quinto centenario editó una selección del poema acompañado de un estudio introductorio realizado por Noé Jitrik . El tiraje fue de diez mil ejemplares, cantidad que sobrepasó por mucho la demanda de los lectores "Balbuenistas" circunstancia que hace posible localizar con facilidad ejemplares a la venta a cambio de unos cuantos pesos.
El hecho de que Bernardo de Balbuena haya nacido en España, no representó ningún obstáculo para que Menendéz Pelayo afirmara, que Balbuena, en rigor, es el primer poeta genuinamente hispanoaméricano.
Balbuena el excelente poeta que pensaba que "toda compostura del mundo es una poesía y un verso espiritual" Debe ser recordado y sobre todo releído.

Tomado de. Ramírez Padilla, Marco F. Diacronìas Revista de Divulgación Histórica, Año 1 número 1, México, Palabra de Clío. 2007

miércoles, 27 de agosto de 2008

FIGURAS Y EPISODIOS DE LA HISTORIA DE MEXICO. Editorial JUS





A mediados de los noventas las librerías de viejo de toda la ciudad de México, se vieron inundadas por miles de ejemplares procedentes de las bodegas de la editorial JUS. Esta situación permitió a los conocedores adquirir parte del agotado catálogo de la casa editorial que sólo era posible contemplar en la casa de los abuelos.
Entre los libros ofrecidos se encontraban algunos de los que formaban parte de la colección Figuras y episodios de la historia de México. Esta colección desde su aparición se convierte en una bocanada de aire fresco, frente la versión oficial de la historia que tanto daño nos ha hecho.

La crítica las recibió así:

"Responder al bombardeo implacable de mentiras con una cortina de artillería de verdades que no sólo equilibre sino que silencie las baterías enemigas, debe de ser una de las tareas ineludibles de los seguidores de la Verdad.
Tal urgente consigna de contraofensiva, por lo que atañe a la pulcra y diáfana verdad esencial de México - tan ferozmente aplastada por una propaganda colosal y mentirosa- está cumpliendola con una gallardía que debe suscitar generosos estímulos y decididas comilitancias una pluma juvenil y valerosa, Alfonso Trueba.
(Oscar Mendéz Cervantes , Novedades 28 de Junio de 1957)

"Son cuadernos que encontramos apasionadamente interesantes, y de un valor cultural inestimable; además de que están tan excelentemente escritos que constituyen una lectura deliciosa, son instructivos, y muy valientes; con frecuencia se combate en ellos, con un sano criterio y oportuna documentación, algún prejuicio histórico, alguna superstición; la doctrina oficial es tratada con independencia y sometida a severa crítica, y tal vez se desvanece algún fantasma , o cobra perfiles alguna figura que había permanecido esfumada y borrosa".
(Rafael Solana. El Universal, 26 de Marzo de 1957)

Se tiraron en la primera edición 3,000 ejemplares y algunos de los más de cien títulos que formaban la colección contaron hasta con tres ediciones. El gran defecto que presenta la colección, tiene que ver con el material en que se imprimió. El papel - hay que decirlo- es de una calidad terrible, por lo que hay que prodigarles algunos cuidados especiales para evitar su destrucción. En la actualidad, aún es posible encontrarse de manera ocasional con algún precioso ejemplar de ésta serie, si tropiezas con uno no lo dejes escapar.


miércoles, 20 de agosto de 2008

Breve relación del ensaye de plata y oro.


La producción minera de la Nueva España experimentó un increíble crecimiento durante el siglo XVII, para darnos una idea, sólo hay que comparar las 68.3 toneladas de plata obtenidas en los años que van de 1521-1540, con las 2,042 producidas entre 1661-1680 periodo que corresponde al año en que se imprimió éste libro.
Este incremento se debe a la explotación de nuevos reales de minas en el septentrión novohispano, pero sobre todo a partir del descubrimiento hecho por Bartolomé de Medina en la hacienda Purísima Grande en Pachuca, de la técnica del "Beneficio de patio". El incremento de la producción y el perfeccionamiento de las técnicas, va acompañado de una serie de publicaciones que pretenden dar luz sobre éstas cuestiones, razón por la que abundan los libros sobre la materia. Uno de esos trabajos fue el libro escrito por Gerónimo Bezerra. Esta breve obra como justamente se indica en la portada (consta tan sólo de 24 páginas) explica en la más barroca, y sinuosa de las formas que puede tomar el castellano la manera de realizar el ensaye.
Así es como define el autor al Ensaye:

"Es el ensaye (en su primera clausula) una clara demostración
de una obscuridad serena aquella por conocida luz del
entendimiento haze veridicos los que pudieran peligrar por
sólo indicios, y naufragar por contingencias; y esta desvanece,
niebla a lo perpicaz de la intelegible forma, que en muchos
átomos se cambia centella, quanto la imaginación turbada
la rezeló inexpugnable campo de sombras."

En la actualidad nos contentamos con sólo decir que el ensaye - es el proceso con que se determina la cantidad de metal en un mineral-. No cabe duda, que aridez, que austeridad tan grande la nuestra en el uso de las palabras, comparada con la de nuestros antepasados.

La lectura de éste libro salido de las prensas de Francisco Rodríguez Lupercio, es un ejercicio que nos permite experimentar una deliciosa mezcla aderezada con un poco de química, otro tanto de alquimia y mucho de ingenio.

martes, 19 de agosto de 2008

¿Cómo se llamaba en latín la ciudad?



El pie de imprenta en los libros antiguos, ofrece en unos cuantos renglones una serie de datos, entre los que destacan el impresor, el año y la ciudad en que se realizó la impresión. Siendo el latín la lengua común utilizada por los intelectuales hasta finales del XVIII, no sorprende que la información se encuentre en el mismo idioma. Esta situación no representa mayor obstáculo para la comprensión de los datos, sin embargo en lo referente a la ciudad donde fue impreso es muy probable que surjan algunos problemas. Esto se debe primero a que el nombre latino ha variado con el tiempo, además resulta muy común, que una misma ciudad cuente con varias designaciones y que muchas formas de nombres latinos se deben más a caprichos de aprendices latinistas que a razones históricas o geográficas clásicas.
A continuación menciono algunos ejemplos de la desiganción en latín de unas cuantas ciudades cuyos frutos bibliográficos es probable encontrar en las bibliotecas novohispanas.

- Amberes. Ambivaritum; Ambivitarum; Antuerpia; Handoverpia.
- Amsterdam. Aemstelaedanum; Aenstelodanum; Ansterodanum.
- Astorga. Asturica; Austurica Augusta; Colonia Augusta Austurica.
- Augsburg. Augusta; Augusta Vindelicorum; Tragopolis.
- Badajoz. Badia; Pax Augusta.
- Barcelona. Barcino; Barcinona; Barchino; Barxino; Barci; Barcum.
- Besancon. Bisuntia; Bisuntium; Vesontio; Visuntio.
- Bilbao. Flaviobrigia.
- Brujas. Brugae; Bearniae; Brugis.
- Burgos. Bravum Burgi; Bravumburgum; Burgi; Burgum.
- Cádiz. Gades; Gaditana Civitas.
- Colonia. Agrippina; Colcestria; Colonia ad Rhenum, Colonia Agrippina; Colonia Augusta Agrippina; Colonia Ubiorum; Koln.
- Ecija. Astigi; Astigitana Colonia.
- Frankfurt. Francofordia; Francofurtum ad Moenum; Francophordia; Helenopoli; Moeno Francofurti.
- Geneve. Aurelia Allobrogum; Colonia Allobrogum; Genava; Genua.
- Hamburgo. Hamborgum; Hamburgum; Hammona; Marionis.
- Jaen. Flavium; Flavium Aurgitarum; Giennium.
- Leiden, Leida; Leida Batavorum; Lugdunum Batavorum; Lugodini.
- León . Legio Septima Gemina.
- Logroño. Juliobriga; Luciniburgum; Lucronium; Lugrunium.
- Londres. Augusta Trinibantum; Londinium; Londonia.
- Lyon. Lugdunum.
- Madrid. Colonia Viriata; Madritum; Mantua Carpetanorum; Matritum; Viriathica.
- Manila. Manilla.
- México. Mexici; Mexicum.
- Milan. Mediolanum.
- Munich. Monaco; Monachium.
- New York. Neu Eboracum; Novum Eboracum.
- Nuremberg. Norica; Noriberga; Norimberga; Nuremberga.
- Paris. Lutetia; Lutetiae Parisiorum; Parigi; Parisius.
- Puebla. Angelopolis.
- Quebec. Quebecum
- Ronda. Arunda
- Salamanca. Salmantica.
- San Sebástian. Donastieum, Sanctus  Sebastiani Fanum
- Sevilla. Colonia Julia Romana; Hispalis; Ispalis.
- Strasburgo. Argentina; Argentina Reni; Argentoratum; Augusta Elvetiorum; Augusta Trebocorum; Trivocorum.
- Tarragona. Tarraco, Tarracona.
- Trujillo. Castra Julia
- Utrecht. Rheno trajectum, Trajectum ad Rhenum; Trajectum Batavorum; Trajectum inferius.
- Valencia. Valentia; Valentia Edatanorum.
- Valladolid.  Pincia; Pintia; Valdaletium;  Vallisoletum.
- Venecia. Portus Venetus; Venetia; Venetiis
- Wurzburg. Artaunum; Herbipolis; Wirceburgum; Wirtzeburgii.
- Zamora. Ocellodorum; Sentice.
- Zaragoza. Caesaraugusta; Cesaraugusta.

Bibliografía.
Mantecón , José Ignacio. Indice de nombres latinos de ciudades con imprenta 1448-1825. México, UNAM, 1973

sábado, 16 de agosto de 2008

La colección Tezontle


Tezontle es una de las colecciones más conocidas entre las que publica la editorial mexicana Fondo de Cultura Económica F.C.E. El poeta Francisco Giner de los Ríos reveló las caprichosas circunstancias por las cuales se nombró así a ésta serie.
Hacia 1940, año en surge el primer libro de esta colección, Daniel Cosío Villegas propuso que se agregara a la nueva serie como pie Cenzontle, pensando en el ave canora y su poético significado en náhuatl "pájaro de 400 voces." Una vez que se toma semejante determinación, ésta se comunica por teléfono al impresor, pero debido a algunas fallas en la comunicación, el cenzontle se transformó para siempre en piedra volcánica.
Esta circunstancia no afectó en absoluto el sino del catálogo, por el contrario representó un buen augurio, en la actualidad la colección ofrece más de 500 títulos tiene los cimientos de piedra y aspira a los alcances de un ave.

Fray Gerónimo de Mendieta y su Historia eclesiástica Indiana.



Presentamos algunos datos curiosos del autor de la Historia eclesiástica indiana.

Fray Gerónimo de Mendieta  nació en la ciudad de Vitoria en 1525, fue el último de los cuarenta hijos que, en tres matrimonios tuvo su padre.
Vino a la Nueva España a los 29 años, estuvo en Toluca, Tlaxcala, Xochimilco, Tepeaca, Huejotzingo cumpliendo con su labor de conversión. Su  afición  a la  pintura lo  llevo a  elaborar  obras  con pasajes de las  Sagradas  Escrituras  que  utilizaba como recurso de enseñanza  en  las clases de  doctrina.

Al poco de tiempo de arribar a estas tierras aprendió el náhuatl, resultando que, tartamudo en castellano, apenas empezaba a hablar a los indígenas en su idioma, se comunicaba con una fluidez insospechada.
Comenzó la redacción de su obra en 1573, esfuerzo que ve culminado 25 años más tarde.
En los tres libros, 107 capítulos y 800 páginas del libro, se narran con un estilo fresco y atractivo, algunos de los sucesos originados de la evangelización, los ritos y costumbres, así como la habilidad e ingenio de los aborígenes, finalizando con detalladas biografías de los primeros franciscano venidos acá.
Por tres largas centurias ésta obra fundamental permaneció inédita, hasta que en 1870, don Joaquín García Izcalbaceta la rescató, publicándola (como acostumbraba) en una magnifica edición. A la Historia eclesiástica Indiana impresa por Don Joaquín, le sucede lo mismo que a sus otros trabajos, son tan apreciados por los conocedores, que resulta prácticamente imposible hacerse de algún ejemplar de la  edición . Por  fortuna para el consuelo de los nuevos lectores Salvador Chávez Hayhoe la  publicó en cuatro volúmenes enn 1945, por  su  parte  Editorial Porrúa  realizó en  1971, una edición facsímilar de la de Icazbalceta..

Bibliografía.


Acevedo Escobedo, Antonio, Puertas a la imaginación, México, Editorial JUS,  1974.
Enciclopedia de México, México, SEP , 1987,  XIV T. 

jueves, 14 de agosto de 2008

La imprenta en Armadillo San Luis Potosí



El establecimiento de la imprenta en Armadillo es uno de los acontecimientos de éste tipo menos estudiados, a pesar de tener el mérito de haber sido el sexto sitio de la Nueva España en donde se fundara éste arte.
A principios del siglo XIX (circa 1805) en la norteña "Villa de la Visitación de María Santísima a Santa Isabel de los armadillos" Don Alejo Infante con ayuda de sus hijos: José María, José Tomas, y Trinidad Infante asumen como misión personal la construcción de una prensa, labor que se llevó a cabo con grandes trabajos, sin embargo nada comparado con los que representaron los encaminados a la elaboración de los tipos para hacerla funcionar. Se realizaron varios ensayos haciendo los primeros tipos con las duras maderas de esa región, después se cambio la madera por el hueso, ante la poca duración que representaban los tipos de semejantes materiales, finalmente se sustituyeron cuando lograron elaborar sus propios tipos con plomo. De esta imprenta se conocen principalmente hojas sueltas, invitaciones, y algunas proclamas. Afortunadamente para los lugareños, el hecho no ha sido ignorado, y representa un motivo de orgullo, tanto así que se cambió el nombre del municipio que a partir de 1951 se llama "Armadillo de los Infante" y en uno de los campos del escudo contiene la imagen de un impresor.
La imprenta de Armadillo se mantuvo en activo por varias décadas, su historia y la de sus producciones aún están por escribirse.

miércoles, 6 de agosto de 2008

Fray Diego Valadés. misionero bibliófilo.


Al estudio de la vida de Fray Diego Valadés, se le han dedicado gran cantidad de trabajos en los que se recupera su ejemplar labor, su persona resulta atractiva en demasía ya que en muchos aspectos encarnó al prototipo del humanista novohispano del siglo XVI. En este espacio quiero destacar el quehacer de Fray Diego, como hombre de libros.
Se sabe que desde sus años de estudiante en la escuela fundada por Fray Pedro de Gante, se enamoró de los libros convirtiéndose en un asiduo lector, en ese sitio aprendió el arte del grabado, en el que destacó de manera importante, es a él que le debemos algunos de los grabados más bellos realizados en la Nueva España a finales del XVI, mención especial merecen los que realizó con la finalidad de ilustrar su Rhetorica Christiana (Perusiae. 1579). Fray Diego de Valadés no se contentó solamente con ilustrar su obra, sino que dibujó las hermosas letras capitulares que encabezan la dedicatoria, el prefacio y la primera página de cada una de las seis partes del libro. La gran cantidad de lenguas que hablaba ( español, latín, náhuatl, otomí, tarasco) lo llevó a realizar algunas traducciones, así como esfuerzos encaminados a posibilitar la escritura de las lenguas indígenas, con éste fin desarrolló un alfabeto mnemotécnico, que es el siguiente paso de los llamados códices Testerianos imprimiendoles un mayor grado de complejidad. Escribió algunas otras obras que permanecen inéditas como la Assertiones Catholicae contra Praecipuos Aliquot Haereticorum Errores (1581).
En el prólogo de su Itinerarium Chatolicvm dice Valadés " Trabajando en la conversión de los indios denominados Chichimecas, viéndome atacado por ellos en cierta ocasión, logre apenas escapar con gran peligro de mi vida y de la de mis acompañantes, pero tuve que lamentar entonces la pérdida de todos mis libros, los cuales había ido reuniendo desde mi juventud con grandes trabajos y desvelos " (folio A5).
Existen testimonios en los que se puede constatar que hasta los años finales de su vida, el recuerdo de este evento le provocaba gran dolor.

En fin, un hombre de libros en el sentido más amplio.
Bibliografía. Palomera, Esteban J. Fray Diego de Valadés O.F.M. Evangelizador Humanista de la Nueva España. México, Editorial JUS. 1962.

martes, 5 de agosto de 2008

La Historia Universal de Cesár Cantú





Hacia 1840 se estableció en la ciudad de México el impresor español Andrés Boix, logrando en poco tiempo convertirse en uno de los impresores más destacados de la capital. Para consolidar la posición de su empresa, en noviembre de 1850 se asocia con los dueños de la Librería Americana, Carlos Besserer y Juan J. Kienest estableciendo la sociedad Boix, Besserer y Cia. El proyecto que se convierte en la punta de lanza de esta sociedad es la edición de la Biblioteca Universal Económica un proyecto editorial que buscaba atraer a los lectores abarcando diferentes temas. Entre los temas abordados ocupó un lugar destacado la historia. Dentro de esta colección se publica La Historia Universal del italiano César Cantú, obra que había sido vendida con gran exíto, en varias lenguas a lo ancho y largo de Europa. La edición mexicana fue traducida por el historiador y literato español Antonio Ferrer del Rio, se editó en 5 tomos que aparecierom entre 1851 y 1853. A pesar de que a la editorial de Andrés Boix se le identificaba como de tendencia conservadora, la obra de Cantú fue aceptada por todos los públicos gracias a la fama de la que gozaba el autor, tanto así que bastaron solamente unas semanas de la apertura de las suscripciones, cuando ya se habían rebasado las 2000 solicitudes.
La Historia Universal de Cantú reviste de gran importancia ya que su influencia es perceptible a nivel historiográfico en algunos de los trabajos realizados en nuestro país a finales del XIX.
Adicionalmente a la importancia de su contenido, estos libros fueron elaborados con gran esmero dando como resultado un objeto hermoso. Cuenta con una tipografía muy bien cuidada, en la que resultan especialmente atractivas y modernas algunas de sus letras capitulares, salpican al libro bellas ilustraciones y un grabado retratando al autor, su encuadernación se realizó en pasta dura a la holandesa. El lomo es de piel color tabaco y las pastas azul marino adornadas con múltiples grecas en relieve. El contraste de lomo y pastas le da un toque especial de elegancia.
Curiosamente a pesar de haber sido un gran acontecimiento editorial, La Historia Universal de Cantú en su edición mexicana no es  muy  abundante.




EDITORIAL CVLTVRA.



Una de las editoriales más importantes en México durante la primera mitad del siglo XX, fue sin duda la Editorial Cvltvra, empresa que nace en 1916 en pleno movimiento armado. Bajo la dirección Agustín Loera y Chávez y Julio Torri comenzaron a publicar los libros que formarían su nutrido catálogo. Una de las colecciones más importantes fue la Antología Mensual de Buenos Autores, que dirigió José Gorostiza. En esta colección aparecieron cientos de obras de autores mexicanos y extranjeros, antiguos y modernos pero invariablemente de gran calidad. Se vendían por tomos y cada tomo constaba de seis ejemplares, la suscripción por seis meses costaba $6.25



Cvltvra editó obras que se distinguieron no sólo por la calidad de su contenido, sino que publicó algunos de los libros más hermosos que se editaron en México durante la primera mitad del siglo XX. Destacando por su composición tipográfica, diseño ( en especial los diseñados por Rafael Loera y Chávez), papel, como el caso de Panchito Chapopote impreso en papel de china naranja y pegado a la tercera de forros. Sus ilustraciones resultan igualmente hermosas, algunas de ellas elaboradas con grabados en madera realizados por Francisco Diáz de León. Entre las obras editadas por esta casa cabe mencionar las de Artes Populares, Iglesias Mexicanas, Oaxaca (1926) y Taxco, ilustradas y diseñadas por Francisco Díaz de León. El tratamiento gráfico en estas portadas recuerda al del Arts and Crafts. Gracias a la conjunción de estas cualidades es que la mayoría de los libros producidos por editorial Cvltura, se consideran verdaderas joyas bibliográficas, que con el paso del tiempo se han convertido en codiciados trofeos para los bibliófilos.

Si tienes algún ejemplar impreso por Cvltvra no te desprendas de él.