
En 1674 se realizó un listado de los  bienes de Juan Ruiz entre los  que se incluyó el inventario  de los materiales con  los  que  contaba su establecimiento:
"Dos  prensas de madera  con lo necesario  y la de una de ellas corriente y moliente que no se puede trabajar en ella; un tórculo de madera así mesmo corriente; tres cajas de letras y moldes de plomo de tres géneros, la una atanasia, la otra redondilla y la otra lectura, con poca letra bastarda, más otros tres cajones de los mismos géneros de letra vieja que llaman los impresores ; dos ramas , una de marca  mayor sin crucera y la otra de papel ordinario con crucera; setenta moldes de tabla  de diferentes santos pequeños ; otras setenta tablitas de molduras, diferentes escudos y armas; cuarenta tablas grandes de a media vara  de estampas de santos de a pliego; ocho tablas de medio  pliego de diferentes santos; ciento y diez y seis letras de madera esculpidas para moldes; quince  instrumentos para vaciar  letra de plomo  y dichos instrumentos son de bronce, corrientes siete y los demás desbaratados; una  cajita  mediana  con los adherentes necesarios a los instrumentos ; tres petaquitas con matrices para ajustar,  las  dos de matrices y la una de punzones ; un papel de matrices de bastardo atanasio; un papel con cuatro envoltorios de matrices de letra lectura; otro papel con cuatro atados de letra redondilla; otro papel con cinco envoltorio de letra pelican;  un chiquigütillo mediano con diferentes letras para ajustar ; un banco  con su bigornia mediana y su tornillo de hierro; un chiquigüite con diferentes  hierros como son lima , alesnas  y otros  tornillos y plomos , más otro chiquigüitillo con instrumentos medianos para aderezo de los  instrumentos  grandes. 1   
La información  que proporciona  el inventario nos habla de la capacidad, funciones y limitaciones de la imprenta, por otra parte nos   damos  cuenta que se trata  de una imprenta novohispana, la gran cantidad de grabados  de santos,  en relación con los otros materiales  resultan un  buen indicador. Pero el  hecho  que lo confirma por completo, es el uso de nuestros queridos y populares chiquigüites  como contenedores de los  diferentes instrumentos destinados a la impresión.
1 Iguíniz B, Juan. Disquisiciones Bibliográficas. México, UNAM, 1987. p. 209 - 210
1 Iguíniz B, Juan. Disquisiciones Bibliográficas. México, UNAM, 1987. p. 209 - 210
Enhorabuena por el blog que acabo de conocer y que seguiré a partir de ahora. La imprenta en México es apasionante y todas las contribuciones a su estudio son fundamentales. Saludos bibliófilos desde España, Diego.
ResponderEliminarExcelente artículo¡¡¡¡ saludos bibliófilos, Diego.
ResponderEliminarDiego.
ResponderEliminarMe da mucho gusto recibir tus comentarios. Tengo que decirte que me paseo con mucha frecuencia por las interesantes entradas que publicas en tu blog.
La bibliófilia es una de las pasiones que nos permiten recordar y entender la enorme cantidad de lazos históricos, culturales y espirituales que nos unen.
Saludos bibliófilos desde México Marco.