Carmen Mondragón mejor conocida como Nahui Olin es una figura que provoca enorme fascinación, su legendaria belleza la convirtió en la musa favorita de los personajes que participaron en la efervescencia artística, cultural y creativa generada en los años veintes, sus ojos verdes aparecen reproducidos en fotografías, cuadros y murales creados en esa década. Además de servir como fuente de inspiración dejó importantes aportaciones como pintora compositora y escritora. Tanto en sus creaciones como en su vida cotidiana, desafió el rol asignado tradicionalmente a la mujer mexicana. A inicio de los noventa tras de su redescubrimiento, se convirtió en figura emblemática para una sociedad que hasta ahora sigue padeciendo al machismo como uno de sus mayores lastres.
Un poco antes que comenzara la exitosa recuperación histórica de la figura de Nahui Olin era posible encontrar de vez en cuando alguno de sus libros, en esa época tuve la oportunidad de adquirir un par de ellos. Por una cuestión exclusivamente de azar se trató del primero que escribió y del último que publicó
A dix ans sur mon pupitre es un libro que nace a partir de los escritos que realizó la autora en 1903 cuando tenia diez años. La manera en que llegó a las prensas fue muy curiosa, Gerardo Murillo, mejor conocido como el Dr Atl dejó constancia del hecho en el libro Gentes profanas en el Convento (1950). En lo que parece un gesto de caballerosidad el Dr. Atl. sustituyó el nombre de Nahui Olin, en el libro la llama "Eugenia" en clara alusión hacia el origen y posición social de la familia Mondragón.
"La publicación de los poemas de Eugenia escritos en francés, (*) produjeron un resultado verdaderamente extraño, despertaron interés en donde yo menos hubiera podido sospecharlo: en un colegio de monjas.
Una mañana se presentó una dama de aspecto monacal, llena de dignidad, de modales suaves, de voz firme que pronunciaba un francés de Paris. Ella me dijo: - Yo soy Marie Luise maestra del colegio francés y tuve a mi cargo las primeras enseñanzas de la que es ahora amiga de usted y le traigo un regalo que le sorprenderá. Esta niña era extraordinaria. Todo lo comprendía, todo lo adivinaba, su intuición era pasmosa. A los diez años hablaba el francés como yo, que soy francesa, y escribía las cosas más extrañas del mundo, algunas completamente fuera de nuestra disciplina religiosa."
El regalo era un paquete que contenía los papeles que celosamente habían sido guardados por la monja, al verlos se llena de una enorme alegría y emprende los preparativos para su publicación.
El otro libro lleva el título de Energía Cósmica fue impreso por Ediciones Botas, al parecer la portada la diseñó Nahui Olin, sobre el contenido me resulta difícil de clasificar, por momentos da la impresión tratarse de un poema en prosa, a veces es un texto con pretensiones científicas, la mención de Albert Einstein unida a conceptos como electricidad, átomos y relatividad abonan en esa dirección, sin embargo al encontrarlos unidos a conceptos como éter y vitriolo nos remite a los antiguos tratados de alquimia o podría ser el último estertor inspirado en el Estridentismo.
El libro de Nahui fue publicado después de que sufriera la inesperada muerte en 1934 de Eugenio Agacino quien fuera su último amor. Nahui ya había iniciado el proceso de aislamiento que la hizo apartarse de todos, pobreza, soledad y olvido fueron las constantes durante los últimos años de su vida.
A dix ans sur mon pupitre. México, Editorial Cvltvra, 1924. 62 pp. 191 x 245 mm.
Energía Cósmica. México. Ediciones Botas, 1937. 72 pp. 175 x 240 mm.
* El Dr. Atl se refiere al libro Calinement je suis dedans. México, Librería Guillot, Talleres de la imprenta Franco-Mexicana S.A. 1923. 150 pp.
Bibliografía.
Murillo, Gerardo ( Dr. Atl ). Gentes Profanas en el Convento. México, Ediciones Botas. 1950.
Hay que descubrirse ante este tipo de mujeres que desafiaron todos los prejuicios. Por desgracia el precio que pagaron muchas de ellas fue altísimo. Pero rompieron con todo lo establecido y defendieron la libertad y la igualdad de la mujer abriendo caminos que ya no tienen vuelta atrás.
ResponderEliminarBonitos libros y preciosa portada.
Un fuerte abrazo.
Alfonso.
Estimado Alfonso.
ResponderEliminarAfortunadamente, desde los noventas hay personas que han puesto gran interés en recuperar su memoria.
Como bien dices el costo personal fue muy alto, pero gracias a personas como ella, hemos avanzado en construir una sociedad más justa.
Te mando un fuerte abrazo.
Marco.
Marco Fabrizio,
ResponderEliminarLo que son los tópicos. Frida Khalo es la mexicana por excelencia y nos presentas otra de la que todo lo desconocía.
En fin, cuantas mexicanas, españolas, venezolanas, inglesas... hay que se arriesgaron y que hoy desconocemos? Esperemos que poco a poco vayan saliendo a la luz com entre otro tu has hecho con Nahui Olin
Amigo Galderich.
ResponderEliminarMe da mucho gusto que por medio de este modesto espacio se pueda compartir personajes tan fascinantes como el de Nahui Olin.
Sin el grupo de mujeres formado por Nahui Olin, Frida Khalo , Antonieta Rivas Mercado, Nelly Campobello, Lupe Rivas, Tina Modotti ... El movimiento artístico de los veintes no hubiera sido el mismo.
Un fuerte abrazo.
Saludos Estoy trabajando una novela gráfica sobre Nahui Olin y por azares de la vida se presentó en Casa de Francia, en un fanzine impreso por ellos y en Nerac en una festival galo de bande desisnée. Ahora esta navidad sugo trabajando en ese proyecto y en enero regreso a Francia a otra expo que tenemos de novela gráfica mexicana en Angouleme.
ResponderEliminarMucho se habla de su vida tormentosa y de sus pinturas, pero se sabe poco de sus escritos que sería muy bueno rescatar y ofrecerlos en PDF... de parte de su pariente...
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